JUVENIL: Gótics 0 – Sitges 39

Llegábamos con los deberes hechos, habíamos confirmado que éramos 15, aunque todavía quedaba un último escollo que salvar; el partido era el domingo por la mañana y la noche del sábado no es extraño que se cobre alguna víctima… y así fue, Álex no puede levantarse por enfermedad, de la buena, de la que necesita anticuerpos para curarse, ya somos otra vez 14… pero aún hay más, Jorge no aparece; una llamada de teléfono y una voz desde las profundidades de su ser que responde a duras penas “me he dormido un poco”… la expedición parte hacia Barcelona capitaneada por Alberto “hospi” Montero a ritmo de chumba chumba, y a la entrada de Barcelona Alberto que toma un atajo poligonero que dibuja el paisaje perfecto para una fiesta ilegal…algunos se relamen… pero nada de eso, el chumba chumba ya resuena en la Foixarda, coches aparcados y desembarco de polizones camino del vestuario. Rezagado llega Jorge, con lo típico; que si el despertador bla bla bla… pero la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida; al avisar al árbitro de que somos 14 nos contesta que el Gótics de momento no son 11 y que ya veremos si se juega…
SITGES: Jordi, Dani T., Eric, Brian, Kelsey, Albert, Josep T., Guillermo, Sebas, Jorge, Nico, Gerard, Luis y Miquel. Aficionados de excepción Danny “lineman” Tree y Martí Franco, sin parentesco con el generalísimo.
Mientras calentamos asistimos a un goteo de jugadores del Gótics que van llegando, finalmente son más de 15.
La mañana soleada y el oval que vuela silbato arbitral mediante; los inicios son duros, con una defensa de plastilina permitimos que el Gótics avance demasiados metros a través de un juego muy directo que en última instancia siempre conseguimos abortar. En ataque estamos lentos e imprecisos y los apoyos brillan por su ausencia, aunque en una rápida jugada de los tres cuartos conseguimos ensayar. Nada cambia, juego impetuoso del Gótics que no suma puntos y chispazos con puntos por nuestra parte, 0 a 17 al descanso.
Alberto, que está en todo, provee de una rica macedonia a los chicos, que la riegan con agua; yo les riego el cerebro con un “chicos, podemos y debemos hacerlo mucho mejor”.
Mejoramos un poco, poquito, la puesta en acción, y estamos algo más rápidos y efectivos en los apoyos, nada espectacular pero suficiente para disponer de más posesión e ir haciendo subir puntos al marcador, pese a la resistencia de un Gótics que en ningún momento baja los brazos, 0 a 39 y final de un partido que no pasará a la historia del rugby mundial por nada especial, o sÍ; quizás por ese vendaje muy “a lo vasco” que Edu le hace a Kelsey en la cara, esparadrapo generoso sobre una media barba que luego para quitárselo miedo dió…
Pasillo, la mano al rival y al árbitro y un aplauso a la grada.
Ducha.
Tercer tiempo.
Chumba chumba dirección Sitges.
Martes y jueves entrenamiento, sí, entrenamiento. Si alguno duda de la palabra en sí, entrenamiento, buscarla en Wikipedia.
PD: recuerdos nostálgicos a santku, Álex, Alan, Julià y Nathan. Volver.