División de Honor B: RC Sitges 15 – Fénix 10

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La historia ya está escrita; el Sitges debutó en la categoría de plata del rugby estatal con una victoria en su estadio frente al Fénix de Zaragoza, que hincó la rodilla tras 80 minutos sofocantes debido al calor y la humedad.
La ilusión y la motivación del equipo desde que empezó la pretemporada no ha hecho más que crecer, y existía el peligro de que la ansiedad paralizase mentes y corazones. Al llegar al campo veo con agrado, y para tranquilidad interior, que la temida ansiedad iba a tener que buscarse hoy otras víctimas… distendidos, sonriéndole al día, los jugadores transmitían seguridad y determinación. El público iba llegando, sacrificaba el vermuth dominical y se abonaba a la cita del club con la historia. Ya en el vestuario, silencio y calma tensa in crescendo, el último intento de la ansiedad por apoderarse de los locales… en vano.
Sitges: Pablo, Alberto H., Óscar, Antonio, Thiago, Kike, Nic, Albert, Hernán, Martí, Alberto M., James, Nico, Ander, Malcolm. Nico J., Gerard, Héctor, Josep T., Eze, Luis, José Ignacio, Norbert.
El partido inica su cuenta atrás y desvela su clave principal; defensas por encima de los ataques, y en este escenario, la defensa sitgetana dominando por encima de la maña. El partido es empujado a territorio del Fénix a base de defensa, si bien no existe clarividencia para subir al marcador un partido que los locales controlan. El Fénix debe recurrir a las faltas para detener las embestidas locales, que optan por ir sumando puntos a través de golpes de castigo, 6 a 0. Solo algunos desajustes para defender el juego al pie, más desesperado que lleno de intención, le dan algo de aire a los visitantes, que aprovechan un golpe para reducir la ventaja, aunque llegan al descanso con un 9 a 3 adverso fruto de un nuevo golpe de castigo.
Agua, mucha agua tomada de forma voluntaria.
Calor, mucho calor sufrido de forma involuntaria.
La delantera sitgetana es manifiestamente inferior en centímetros y Kg, pero ha sabido sufrir en las fases estáticas, imprecisas por parte de los dos equipos, especialmente en el lateral. El Fénix busca aquí su oportunidad, y sus cambios alimentan con más centímetros y Kg a su pack. El Sitges se mantiene firme en defensa y desde aquí domina el match, agobiando y ahogando una y otra vez el juego visitante. Un nuevo golpe acelera los corazones, 12 a 3 y el partido encarando su último tercio. Un golpe de castigo jugado rápido por los visitantes y no detenido a tiempo por los locales, desemboca en una serie de cargas de los delanteros maños que suben al marcador el único ensayo a la postre del partido, 12 a 10 en el marcador y una tensión que crece por lo incierto del marcador. El partido no cambia su signo, más defensas que ataques y juego entre ambas veintidós, aunque el Fénix controla mejor sus fases estáticas y dispone de más balones. El Sitges no cede, y vuelve a sumar al pie, 15 a 10 a poco del final. El último balón es para el Fénix, que juega fases y avanza, que siembra incertidumbre a cada metro que gana, pero que sucumbe como desde el principio a la buena defensa local.
Final, 15 a 10.
Pasillo, aplausos, reconocimientos, felicitaciones.
Ducha.
Cerveza, cerveza, cerveza, bocadillo, cerveza, cerveza… una tarde larga, recordada.
Y a seguir trabajando, que el trabajo dignifica dicen… vamos no me jodas, a seguir entrenando, que es lo que nos gusta!!! Será un matiz, pero vaya matiz.
Gracias al Fénix y al árbitro, y gracias a nuestra maravillosa afición, siempre fiel.