¿Juveniles o cadetes?: Gótics 0 – Sitges 72

Después de terminar el entrenamiento del jueves anunciar la convocatoria no supuso ningún dilema; convocados los 9 disponibles. Completamos la expedición con 6 cadetes y quedamos citados a las 10 de la mañana del domingo, día en el que nos tocaba enfrentarnos al Gótics en Barcelona.
Al equipo juvenil no le iría nada mal un hada madrina o una lámpara con genio incorporado, y es que tenemos a Murphy haciendo un máster con nosotros y dejando pequeño aquello de “a perro flaco todo son pulgas”; el sábado a Jordi Roselló su estómago le tiene casi a perpetuidad en el wáter, mientras que Giovani aparece con el tobillo inflamado como un globo; “me he caído de la cama” tiene la jeta de declarar… lo cierto es que hacérselo se lo hizo durante la noche, entre sorbito y sorbito…
Domingo, 10 de la mañana: los All Blacks empiezan a tirar arena sobre el cadáver australiano y los chicos van llegando. 14 finalmente, Giovani a estas horas si que no se cae de la cama ni por casualidad. Jordi finalmente llega, el wáter agradece la tregua. Arrancamos.
En el vestuario terminamos de encajar el puzzle de 14 piezas también llamado Rugbi Club Sitges juvenil, que finalmente queda así: Jordi, Dani T., y Josep T. Como primeras líneas, de segundas Kelsey y Brian y de terceras Nico y Seby. De medio melé Alberto, apertura Sebas, los centros para Cristo y Ander y las alas para Pope y Miquel, de arrier Alan. En el banquillo un botiquín y en la grada la afición dispuesta para la ocasión; Danny Tree, Seby padre, Josep y Eduardo que llega con el agua.
Suena el silbato y vuela el oval, que volando aterriza en breves minutos en la zona de ingoal del Gótics. A pesar de ser 14 jugadores la superioridad del Sitges es manifiesta y dominamos todas las parcelas del juego; resolvemos bien los puntos de encuentro, jugamos balones rápidos y encontramos la continuidad dentro de la defensa rival para ir poco a poco sumando puntos y agrandando el marcador.
El partido ha ido avanzando sin mayores sobresaltos, con un Gótics luchador limitado a tareas defensivas y un Sitges que dominaba y movía el balón hasta encontrar los espacios en la defensa rival.
Al final del partido la afición reconoció con una fuerte ovación los méritos de ambos equipos; el sacrificio y esfuerzo del Gótics y el buen hacer aún en inferioridad del Sitges.
Vestuarios.
Ducha, con agua.
Tercer tiempo.
Flashbacks del partido: Jordi Roselló “el embarazado”; después de cada jugada se echaba mano a la “panxolina” y temblaba el wáter en la Fuixarda… ruck a 5 metros de marca, levanta el balón y entra por el cerrado haciendo marca. Dani y Josep Torras “tiembla primo”; estaba en la grada un primo suyo que juega en el senior del Químics y al que le tienen ganas… placajes y rucks por un tubo, trabajo y más trabajo. Kelsey “no sé”; no sabe qué hace su hermano, no sabe qué le pasa en un dedo que está a punto de caérsele… sí sabía lo que hacía cuando amagó un pase y entro directo a marca. Brian “quiero ser protagonista”; bien apareciendo en el juego y reclamando protagonismo. Nico “Ironman”; fuerte, duro, potente e imparable en aquella carrera por la banda que acabó, cómo no, en marca. Seby “¿cuanto queda?”; perezoso, seguramente con ganas de volverse a la cama, aún así trabajando aunque con el freno de mano puesto. Alberto “cubrirme más”; aspiraba a tomarse un vermouth antes de abrir cada balón, aún así bastante bien de ritmo. Sebas “que voy”; recibía y corría, y corría…dirigió bien cuando lo hizo. Ander “capitán”; algún chispazo pero en plan línea de baja tensión. Cristo “transmisor”; centrado más en pasar que en penetrar, quizás pensando todavía cómo Francia ha llegado a la final del mundial. Pope “qué me pasa”; lesionado al final igual que el jueves, con una dolencia extraña que le deja cara de cuadro cubista de Picasso. Fuerte y decidido mientras estuvo, en gran forma. Miquel “superviviente”; aguantó hasta el final sin su temido bajón, estuvo rápido e incisivo. Alan “pienso luego existo”; tranquilo, pensativo, participando casi sin querer. Un sprint, un ensayo.
Felicidades a los jugadores por su trabajo y actitud; no era fácil jugar con 14 desde el inicio y lo han hecho con orden y generosidad hasta el final, sobreponiéndose a todas las adversidades y haciéndome sentir muy orgulloso de ellos, más allá del resultado.
Gracias a la afición desplazada, impagable.
Nos vemos martes y jueves, si queréis.